Ir al contenido principal

¿De quién es la culpa?

Fuente: Flickr.com
Entre los avances y uso de TICs en la educación son una de las necesidades que se ha propuesto a nivel mundial, ya que es la base de un desarrollo igualitario de oportunidades para la sociedad de la información. Se ha hablado de "nativos digitales", "migrantes digitales" y de "analfabetos digitales". 

Pero, ¿cómo se evalúa y clasifica esto? En otras palabras ¿cómo sabemos que un estudiante de secundaria es capaz de dominar el uso de la información, la comparte y es capaz de administrarla? (véase el anexo de los Resultados Nacionales de SIMCE de Tics, p. 27). De verdad es un tema apasionante, y me llama la atención es que los jóvenes que han nacido con la habilidad de reconocer, identificar, y manejar los avances en la tecnología no sea capaz de realizar el trabajo solicitado para tal tipo de evaluaciones. ¿De quién es la culpa de que estos "nativos digitales" no sean capaces de desarrollar una acción cognitiva de aprendizaje?
Si debiéramos ver responsabilidades estaríamos analizando varios elementos, pero centrémonos en el proceso que tienen los centros educativos y los profesores. Hay varios estudios que han hecho estudios y análisis de otros países que ya vienen analizando el impacto del uso de las TICs en los colegios. Podemos ver algunos puntos que me parecen que son importantes (Fuente El blog de TotemGuard).

Baja fiabilidad de la tecnología que se instala. 

Uno de los mayores problemas que se encuentran los profesores en el aula es la fiabilidad de la tecnología que utilizan. A menudo se contrata un acceso lento a Internet, se instala una Pizarra Digital que se estropea con frecuencia, se usan bombillas que se queman con facilidad, se instalan aplicaciones de software que son incompatibles entre ellas o se confía en software obsoleto. Las incidencias técnicas pueden llegar a ser tan frecuentes como una vez al día, perdiendo un importante número de horas lectivas al cabo del año. El centro educativo debe poner los medios adecuados para minimizar averías, cortes y fallos y definir qué nivel de error es aceptable.

Consejos:
1) Comprar tecnologías de calidad probada, no las más económicas. La baja fiabilidad acaba siempre requiriendo un gasto adicional en mantenimiento y reparaciones frecuentes. Pero la peor consecuencia es la desmoralización y el cese por parte de los profesores en el uso de la tecnología del aula.

2) Definir claramente de quién es responsabilidad el comprobar y el mantener la calidad de las tecnologías del aula, especialmente en centros en donde se comparten las aulas entre varios departamentos. Regularmente se debe realizar un inventario de los equipos y del software instalado, se deben actualizar las aplicaciones de software y las aplicaciones que nadie usa es conveniente desintalarlas.

3) Documentar la frecuencia y el tipo de incidencias técnicas que reportan los profesores para poder analizar con informes, qué tecnologías y proveedores dan mejor resultado y asimismo poder dar prioridad a las incidencias más críticas.


Ignorar que el uso de tecnología en el aula requiere de un nuevo diseño y una nueva distribución del espacio 

Con la introducción de la tecnología en el aula se hace normalmente necesario un nuevo diseño del espacio. Esto no significa que el centro educativo deba realizar grandes obras cuando adopta las TIC. Obviamente se hace difícil por temas presupuestarios, pero sí puede adaptar el espacio y la distribución disponible, dando prioridad a una buena visibilidad y fluidez en la comunicación entre alumnos.

Stephen Heppell, ha liderado durante los últimos 20 años proyectos en este campo. Básicamente propone gradas, espacios amplios y mucha movilidad para invitar a la creatividad. Hay momentos que los estudiantes necesitan comunicarse y compartir algo importante, por ejemplo una presentación.

Si los alumnos se sientan conforme a la clásica distribución por filas, en vez de hacerlo de una forma más compacta, esta interacción no es posible. Asimismo, propone que los alumnos más jóvenes puedan sentarse relajados en una cómoda alfombra en clase y para los más mayores sentarlos en gradas. Puedes conocer su trabajo en detalle en El aula TIC del futuro.


Falta de formación para facilitar la adopción de la tecnología 

Una problemática muy usual es la falta de conocimientos informáticos de los profesores para aprovechar los recursos tic: cómo usar la Pizarra Digital, cómo crear un blog de aula, cómo editar gráficos o cómo usar la plataforma Moodle. Aprender a usar los recursos tic y sobre todo entender cómo utilizarlos dentro de una asignatura, lleva su tiempo, especialmente cuando se utiliza la tecnología equivocada por un mal diseño. Incluir formación en el programa TIC del centro, ayuda sin duda a los profesores.

Pero en muchos casos adoptar tecnologías intuitivas y que ofrecen instrucciones claras de uso, simplifica el proceso de aprendizaje y convierte más fácilmente a los profesores con más tecnofobia.

Consejos:

1) Probar cualquier tecnología antes de implementarla de forma definitiva. Profesores con distintos niveles de informática deben testear la nueva tecnología para asegurar que están cómodos con su uso o identificar problemas potenciales a la hora de enseñar.

2) Ofrecer programas de formación creando eventos (aunque sean virtuales) que reúnan a los profesores y puedan intercambiar experiencias en el uso de las tecnologías.

3) Introducir las nuevas tecnologías poco a poco para dar tiempo al aprendizaje y que en la medida de lo posible sean las mismas en todas las aulas para simplificar su dominio.

Estos son sólo algunos puntos, pues el desarrollo de una motivación al uso y administración de las Tics tiene que partir desde una visión clara de futuro y garantizar, por parte de la institución, que sus docentes sean capaces de perder el "miedo" que tienen algunos docentes de implementarla en sus aulas.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Competencias para la clase de religión

Después de un año de silencio, vuelvo a retomar las entradas en mi blog de educación. Ha sido un año bastante turbulento en materia de cambios y transformaciones, tanto del saber didáctico como del saber pedagógico, los cuales quiero ir compartiendo, y no perder el hábito de comunicarlos, a lo menos una vez por mes. En este nuevo post, quiero compartir el trabajo que he hecho en las últimas semanas, y que me ha llevado a escribir estas líneas. Como sabrán soy profesor de religión, y en Chile, desde el año 2004 no hemos tenido ningún ajuste curricular; a la fecha, el resto de las asignaturas ha sufrido dos ajustes curriculares significativos, que los han llevado a establecer el desarrollo por competencias. Llega un momento, que como docente, te piden adecuarte a un esquema que no ha sido desarrollado en tu área. Cabe la pregunta ¿desde qué base construir si no hay un lineamiento claro de una planificación de clases? Y, también la pregunta ¿qué competencias son pertinentes para la

Déjame pensar por ti

Dentro de las habilidades que se esperan de nuestros estudiantes para el siglo XXI está el desarrollo de pensamiento crítico, que no es otra habilidad más que analizar y evaluar la consistencia de los razonamientos. El punto es ¿cuándo el pensamiento se vuelve crítico y en qué momento dicho pensamiento se vuelve propio y no son meramente ideas inculcadas que parecen propias? Desarrollo del pensamiento crítico Es muy importante enseñar a los niños y jóvenes a desarrollar el pensamiento crítico, ya que esto les permitirá evaluar sus circunstancias, tomar decisiones con mayor precisión y comprender mejor el mundo que les rodea. El pensamiento crítico es una herramienta esencial para ayudar a los niños y jóvenes a convertirse en adultos responsables y respetuosos de los derechos humanos. Esto les permitirá desarrollar una mejor comprensión de sí mismos y de los demás, lo que les permitirá llevar una vida exitosa y satisfactoria. El pensamiento crítico también les ayudará a tener una mayor

Thatquiz

Si hay una aplicación web que podría facilitarnos el trabajo de evaluación y corrección es la que les quiero presentar su nombre: Thatquiz . está desarrollada en inglés pero con opción al español. Es una de aquellas páginas que se agradece que aparezcan en el desarrollo pedagógico y les voy a contar el porqué. Llevo más de un mes estudiándola y desarrollando algunas actividades conducentes para el trabajo en clase con mis alumnos, y sinceramente veo que ellos se motivaron por el desafío del tiempo y de querer contestar de manera correcta e incluso de practicar en sus casas. Sé que no es la panacea a todos los problemas que conlleva preparar y desarrollar una buena evaluación, pero es un gran apoyo a la hora de querer ver estrategias de aprendizaje y de cómo nuestros alumnos responden.